Es algo pesado y complicado de leer, pero la verdad: estoy flipando tantísimo que no puedo dejar pasar la oportunidad de explicaros de qué va. Ya sabéis cuánto me gusta espoilearos películas y libros así que os doy por advertidos. Lo que sigue es una… adaptación, para amenizar su lectura y que os entre el gusanillo.
Primera tablilla, columnas
¡Que todo el mundo se entere de lo cojonudísimo que era Gilgamesh.!
A la vuelta de un viaje, cansado pero aun así enérgico (no iba a ser menos) se grabó en un pedrusco bien tocho todas sus correrías.
Y de postre se edificó unas murallas para Uruk (la ciudad). ¡Mirad qué murallas más gonitas! ¡Hasta les ha sacado brillo! ¡Qué mácuas y hermosas! ¡Gordacas y resistentes! ¡Y altas! Menudas murallas más preciosas que se ha cascao el Gilga, oyes.
Admira la losa de la entrada, sí, esa grandota. Pos se la trajo desde donde cristo se sonó los mocos a cuestas, el muy machote. Unos dicen que al hombro, otros que colgando del badajo. Y sea como sea lo hizo sin despeinarse, eso seguro.
¡Sube y paséate por ellas¡ ¿A que molan? Fíjate en los ladrillacos gordotes de la base. ¿Ves que bien puesticos están todos, uno detrás de otro? Pos los puso todos el Gilga en dos patás. Y no es moco de pavo, que la muralla rodea a la ciudad de Uruk y como ves es grande de cojones, con sus chorrocientas arrobas cuadradas de terreno.
Ahora mira esa tablilla de lapislázuliluliluliiii escrita. Contiene todas las hazañas del rey Gilga. Sobre lo valiente y guapo que es. Y lo cachas. Le parió una vaca (sagrada). Partía montañas en 2 de un cuesco sentado en la cima, excavaba pozos con la facilidad que tú te buscas pelotillas en la nariz. Se nadaba océanos y exploraba el mundo por diversión. Él reconstruyó los templos que se jodieron durante el diluvio y le enseñó de nuevo a la gente a qué dioses les tocaba rezar a cada uno. En una pelea entre Gilga y Chuck Norris, ganaría Gilga con la minga... luchando con una mano. Él, y no Élvis, puede decir: “Yo soy el rey”.
A Gilga le montaron a cachos, como el lego, cada uno por un dios diferente. Es 2/3 divino y 1/3 Rambo. Te diré cómo es de grande. Su pié mide metro y medio, su pierna
Gilga se pasa los días puteando a las gentes de Uruk, no descansa ni en domingo. Todo el santo día de arriba pabajo y follándose a todo lo que se le pone por delante. No deja títere con cabeza. Ya sea vieja, joven, prometida, casada, divorciada con hijos, hija de rico o de guerrero con mala hostia y escopeta, esté con la regla o tenga 10 años. Y en los días más calentorros hasta los culillos de los chavalines corren peligro. Perros, gatos, gallinas, mulas, canalones y tinajas, todo se lo zumba, se lo zumba todo, Gilga, el insaciable con pito de metro y medio.
Tal es su obsesión y el tamaño de su mango que la gente está un poco picajosa con él. Los niños se quedan en sus casas temblando y las mujeres en la cama sin poder andar. Y todos se quejaban a los dioses: “Vuestro puto Frankenstein nos está jodiendo pero bien”.
Y los dioses les escucharon. Y después no se les ocurrió nada mejor que volver a jugar al tente. Con un pegote de arcilla y un par de escupitajos hicieron un… engendro de culo peludo. Soltaron a su creación en una estepa. Se llamaba Enkidu y era peludico y greñudo. Un hombre salvaje que no conocía civilización y se pasaba el día correteando con las gacelas con las canicas al aire, el muy hippy, sin más ocupación que pastar y beber en un abrevadero.
Y como suele pasar cada vez que los dioses dejan suelta a una de sus creaciones empezó a dar problemas. Ésta vez a un trampero, que se dio un susto del carajo cuando lo vio, tan peludo y tan desnudo, bebiendo desde el otro lado del abrevadero.
Y el tramperillo fue a donde su padre y le dijo:
Oye, los dioses se han dejao suelto otro Frankenstein. Es peludo y salvaje y va en pelota picada. Está cachas perdido, tiene unos bíceps como melones, ¡me ha dao un susto del copón! Se pasa el día pastando con su manada, y bebiendo en el abrevadero, y cuando le sobra tiempo el muy cabrón se entretiene jodiéndome las trampicas y las redes, con lo que ya no puedo ganarme la vida trampeando en la estepa.
Y el padre del tramperillo le dijo que mejor se fuera a llorarle al Gilga, a ver si el muy cabrón hacía algo útil por una vez en la vida en vez de tanto fornicar y construir murallas y le solucionaba la papeleta.
Y así lo hizo el tramperillo. Fue donde Gilga y le expuso su problema. Lo del abrevadero, lo del susto y lo de las trampas. Y Gilga, que se ve que andaba algo vago le dijo:
Anda y llévate a éste putón verbenero. Se llama Shámkhat (Tera Patrick en asirio) y además de estar buenísima folla como un caballo desbocado. Con decirte que el Kamasutra no es un manual teorico-práctico ni obra de ficción sino su biografía… En fin, llévatela al abrevadero ese de los cojones y deja de darme el coñazo. Añadió una serie de instrucciones y les despidió.
Y así hizo el tramperillo. Se la lleva al abrevadero y se quedan sentados esperando a que aparezca Enkidu. Al cabo de un par de días aparece con su manada. En cuanto lo ve el tramperillo le dice al putón: Alé. Ya está aquí el salvaje. Despelótate y ábrete de piernas como dijo Gilga que hicieras. Y en cuanto te arrime la cebolleta tú “desempeña tu arte de mujer” (frase textual).
Y así fue. Shámkhat dejó caer sus… ¿velos?, quedándose en pelocañón. Al salvaje le aletearon las ventanas de la nariz, alzó la mirada y con un brillo en los ojos cruzó corriendo el abrevadero bramando pitudo. Durante 6 días y 7 noches (ni más ni menos) estuvieron dándole al metesaca (imagino que el tramperillo se hacía pajillas mientras miraba o se aburriría mucho esperando). Cuando finalmente al salvaje Enkidu no se le levantaba ni con grúa, de lo hechopolvo y dolorido que tenía el pito, hizo lo que todo varón con testosterona en vez de sangre en las venas hace en esos casos. Se levantó indiferente y se fue. Se acercó hacia su manada pero las gacelas, al verle (y percibir su olor picantorro a polvorón intenso, supongo) huyeron.
Enkidu quiso correr tras ellas pero las piernas no le respondían (normal, después de una semana a base de polvos), había perdido sus fuerzas, su cuerpo estaba flojo. Estaba débil pero se había vuelto inteligente (imagino que tenía toda la sangre concentrada en la punta del ciruelo y después de una semana de intenso masaje vaginal por fin le circulaba con normalidad y le llegaba al cerebro).
Se acercó al putón verbenero (que seguía espatarrada, con los ojos en blanco y una sonrisa de oreja a oreja) y se sentó a sus pies. Le miró a la cara pues ahora que le habían vuelto listo a base de polvos podría entender su lengua. Ella le dijo: “¡Tienes el culo duro como si estuviera esculpido en mármol! ¡y los abominables como una tableta de chocolate! ¡Y el pecho hecho de acero pa los barcos! ¡Qué patorras! ¡macizo! ¡tiobueno! ¡eres un dios del sexo! ¿Pa qué quieres volver con los animalicos? Anda, vente conmigo a Uruk-la-de-la-muralla-cojonuda, tontorrón, que te va a gustar.” Y le guiñó un ojo.
Y Enkidu dijo: “Venga, va. Que quiero cometir con Gilgamesh a ver quién la tiene más larga. A ver si puede fardar él de echarse 7(días) sin sacarla."
Y hasta aquí he leído. ¿Cómo puede alguien decir que los clásicos son aburridos? :P
Por cierto, en la versión original explican el plan de llevar el putón verbenero a que desfoge y humanice a base de polvos a Enkidu unas 3 veces. Las he resumido para que no fuera demasiado largo. Y todo (incluído el tamaño de su tranca) es verídico, sólo he añadido algún pequeño detalle.
Ale, disfrutad. Y si algún día visitáis Uruk-la-de-la-muralla-cojonuda, caminad con la espalda bien pegada a las paredes, es un consejo.
:P
3 comentarios:
xDDD
Tas pirao :P
Que decirte... Sólo a tí se te podría ocurrir versionar de esa manera un clásico...
Eso sí...
Yo debo estar peor... porque después de leerlo me he puesto a pensar, y he llegado al convencimiento de que esta historia era, en aquella época, lo mismo que las pelis porno hoy en día...
Tiene la misma estructura... La historia en sí no tiene ningún argumento salvo ensalzar el tamaño del miembro del protagonista, así como su incansable búsqueda de sexo.
Las mujeres no tienen ningún papel en la historia salvo ser objeto sexual para uso y disfrute de los hombres...
Y al final, todo se reduce a una competición a ver quien la tiene más larga y quien folla más...
Como se puede ver, lo mismo que una típica peli porno... Escrita por hombres para hombres...
Buuuuh
POs que sepas que tambien ensalzan el tener el culo peludico :P
Y la verdadera protagonista, al igual que en las pelis porno, es el putón verbenero :P
Por cierto, no lo he versioneado TANTO. Los hechos son talcual (iba "traduciendo" párrafo a párrafo, modificando sólo el lenguaje y metiendo alguna coña)
Cuando me lo acabe quiero el rey mono!
Es que los culos peludicos... tienen su aquel, normal que los ensalcen :P
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